Va a ser padre. Él. «El Rafita». Está esperando un hijo. Él. El condenado por participar en el salvaje asesinato, violación y atropello, en el que participó, junto a otros tres sujetos, de la joven getafense, Sandra Palo, con la que se cruzaron de manera fortuita en una parada de autobús el 17 de mayo de 2003. «El Rafita» o «Pumuki» será padre en enero. Él, quien, además, con sus tres cómplices, quemaron a la joven con un euro de gasolina cuando aún estaba viva. Tenía 14 años. Ahora tiene 22. Los mismos años que tenía la infortunada víctima. Y se estrenará como padre en 2011.
Ha vuelto a Alcorcón. A la casa de su conflictiva familia de la que no se quiere separar aunque sepa que ese entorno es como un cáncer para él. Él lo ha elegido así. Ya no se esconde. Veinticuatro horas antes de que termine de pagar su pena y quedar libre ante la Justicia, ABC habló con él.
«A mí todo eso me da igual»
«¿Qué que pienso ante mi libertad?... Joder. Qué pesados sois los periodistas.... Todo eso me da igual; a mí ya me da igual todo», repite constantemente ante nuestra insistencia y con desgana, arrastrando las palabras. Ha costado captar su atención. Le hemos tenido que llamar hasta en tres ocasiones por su nombre hasta que se ha dado por aludido y nos ha lanzado algo...................................................